La oposición y el “síndrome de la histeria”
La crítica de la oposición a la política económica del gobierno de Cambiemos no respeta la ciencia: la política económica es una disciplina que consiste en administrar restricciones.
Le exigen al gobierno que no aumente tarifas pero, a la vez, también se oponen a que emita dinero y genere inflación para financiar los subsidios. El único camino es, pues, la emisión de deuda pública. Pero tampoco les gusta.
Padecen el síndrome de la histeria
Dado que el gobierno anterior vio cerrado el acceso a los mercados de capitales, inventó un relato en el cual decía que estaba llevando adelante una política de “desendeudamiento”, cuando en verdad, el gobierno no se endeudaba porque había quedado afuera del mundo.
Una política cara, porque para ello pagaba deuda pública con reservas cash, hasta que se acabaron, claro. Para ello necesitaron instalar otro absurdo: endeudarse es “malo”.
Heterodoxia, deuda y déficit fiscal
¿Estarán todas las empresas y familias del mundo equivocadas? Porque todas conviven con deuda, toda su vida.
No sólo el gobierno anterior compró esa idea, sino que buena parte de la sociedad también.
Ismael Bermúdez (periodista de Clarín) ilustra en una nota de la semana pasada, un panorama crítico en materia de Deuda Pública. Sostiene que sólo este año se “emitieron” u$s 28.000 millones de deuda. Estoy en condiciones de afirmar que hubo un manejo excepcional de la deuda pública por parte del gobierno, y sobra (mucho) margen para endeudarse. Paso a demostrarlo con los propios números de Clarín:
- Para pagarle a los fondos buitres se emitieron u$s 16.500 millones.
- La mayor parte de esta cosa no es nueva deuda, sino deuda performing a cambio de deuda en default. La deuda no aumentó, se reconoció su existencia. El gobierno cambió un pasivo por otro de igual magnitud. Hasta un contador lo entiende, no hace falta ser economista.
- Nos quedan u$s 11.500 millones. Una parte consistió en colocaciones de deuda para refinanciar deuda vieja (se llama roll over, es a lo que se dedican todos los países del mundo), es decir, no aumentó el endeudamiento.
- Otra parte fue financiamiento a las provincias ¿No éramos un país federal?
- Y otra parte, mínima, financiamiento del déficit fiscal.
Más virtuoso y prolijo el manejo de la deuda pública, no se me ocurre. Argentina tiene una relación deuda/PBI en dólares muy baja (tal como muy bien señaló en una de sus últimas cadenas nacionales Cristina Elisabet Fernandez), hoy en el orden del 15%.
En el Reino Unido esa relación es de 170%, por ejemplo. Esa holgura para endeudarnos nos va a permitir hacer una reducción gradual del déficit (aumento de tarifas), sin inducir una recesión.
Se llama “heterodoxia”. Por el contrario: el candidato a Ministro de economía por el FPV, Miguel Bein, pronostica una tasa de crecimiento del PBI del orden del 5% para el año que viene.